Vaivén

El cambio es lo único constante en la vida, hoy estamos aquí siendo y sintiendo de una manera determinada, mañana allá en el otro extremo del mundo, sintiendo muy distinto y haciendo lo que jamás imaginamos.

¿Somos hojas que lleva el viento o tenemos la libertad de guiar nuestras vidas?

Creo que el mar en su naturaleza nos brinda una mejor respuesta: en el vaivén de las olas se traduce la vida, existir es un ir y venir constante; donde cada ola es una experiencia, ilusoriamente similar por fuera, sin embargo como cada ola distinta a las demás.

En la vida hay mareas altas, como atardeceres románticos e inolvidables; hay tsunamis devastadores, como calma infinita; hay días de abundante pesca, como náufragos suplicando por otra oportunidad.

Puedes deslizarte por encima el mar y sentir que lo conquistas, corriendo el riesgo de ahogarte y convertirte en su víctima, puedes navegar por los mas inexpugnables paisajes marinos, sin embargo nunca terminarás de conocerlo por completo; puedes solo mojarte los pies o bucear en la búsqueda de la más hermosa perla en las entrañas del mar.

Todos somos una gota de mar salina inmersos en un trayecto y compás superiores al alcance de nuestras conciencias, sin embargo el mar nos necesita para seguir existiendo, podemos ser la gota que inicie el cambio de marea, trazar nuestro objetivo y sentir su fuerza inconmensurable aunada a la búsqueda de un sueño, que puede ser el nuestro.